Naufragando en atxarte.

Ga se ha currado una crónica de nuestra aventura personal en el primer espolon de Atxarte haciendo las vias Naufragos + kike muy chula. Yo solo he puesto una mininota, y colgado algunas fotos. Y mañana repetimos! Esta vez el doble de metros de pared encadenando el primer y el tercer espolón y hacer cima en el Aitxiki, primer monte de piedra que subí hace ya unos cuantos añitos.

¡Menuda aventura nos espera!

Que bien se esta cuando se esta bien (y 2)

Si el otro día hablaba de lo bonito que es a veces disfrutar en soledad este finde hemos comprobado lo bonito que es disfrutar de la escalada con buenos amigos. Y eso que hubo momentos de «tensión» en la reunión del frote 🙂 Pero al final todo salió genial, a pesar de tardar casi 6h en hacer una via de 2h 🙂 Pero bueno, hemos elegido aprender por la vía dura (la autodidacta), y este sábado hemos aprendido mucho.

Este finde repetimos!

Mal cuerpo …

… el que se me ha quedado después del susto de ayer 🙁 Era un finde cojonudo. El sábado con los compis de la uni a hacer el indio al monte. De tranquis, disfrutando del paisaje y de este invierno templado que tenemos.

El domingo la Bilbao-Bilbao. Una cita importante para los cicloturistas. Todo listo para pasar un día pedaleando junto a otras 5000 personas. Amanece un día bonito. Salimos prontito y vamos tranquilos hasta el avituallamiento. Todo a bien, aunque estamos en una zona peligrosa (de Umbe a la subida de Morga el pelotón se aprieta y hay que ir con mil ojos).

En la subida a Gerekiz y Morga estamos pletóricos. Ya solo nos queda bajar Morga y atravesar la peor parte la nacional 240, con tráfico abierto desde Galdakao hasta Bilbao. Algún susto con un autobus pero todo bien. Subida a Begoña, dando todo como campeones y dejarnos caer por Zumalakarregi hasta el Puente de la Salve. Y justo antes del puente una pequeña curva con subida. Entramos lanzados (50km/h) y como es corta todos nos ponemos de piés y apretamos para subir del tirón. Justo sobrepaso a Fiz cuando oigo un «crack» y por el rabillo del ojo le veo volar. En el momento sabía que había sido la cadena, que al romperse le había hecho dar una pedalada en falso y salir volando (3 vueltas dicen). Uff, menudo susto, clavar los frenos y volver a tras corriendo a ver si estaba bien. Los servicios médicos aparecen en un instante (ni medio minuto) y parece que no tiene nada grave. Eso si, de seguir montado en la bici nada. Se lo llevan en ambulancia hasta la meta (a 1 km o así) y Victor y yo llevamos su bici hasta ella.

Lo peor no es no haber llegado montados a la meta (al final entramos los 3 a pata, pero ni regalo ni leches, que se habían acabado), ni que se nos halla fastidiado el ir el próximo finde a la Erandio-Erandio, ni la avería en la bici (parece que solo a salido mal parada la rueda delantera), sino el monumental susto que me lleve.

Y es que otro amigo ya me lo decía a coger la flaca, que tuviese cuidado, que la carretera es muy peligrosa 🙁